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Equitación...

Dicen que quien pisa fuerte deja huella, y a lo largo de mi vida, considero que he dejado alguna que otra huella marcada (en el buen sentido) a nivel deportivo, ganando trofeos y medallas desde muy chica, y aprendiendo a competir contra rivales que luego serían mis amigos fuera de lo deportivo.

Tal es así que a mis 16 años, y luego de una visita a un campo, me hice empezaron a llamar la atención los caballos, con su fortaleza y su grandes huellas con cada paso que dan, me han hecho sentir identificada, y es por eso que me animé a ir a más y entrenarme en equitación, también a nivel competitivo.

Mi primer acercamiento lo realice en el Hipódromo de Buenos Aires, en el barrio de Palermo, junto a grandes profesores de equinoterapia, donde no sólo nos enseñaban al cuidado de estos increíbles animales, sino también a montar de manera correcta y como la palabra lo dice, realizar un tipo de terapia física acompañada de los caballos, de ello, la palabra "equinoterapia".

Vale hacer mención a este tipo de terapia, (la cual no es entrenamiento) ya que pocos la conocen y resulta muy eficaz en pacientes con diferentes problemas de salud. Es por eso que la equinoterapia se utiliza como soporte terapéutico en enfermedades físicas y psíquicas y que tiene por finalidad mejorar la calidad de vida de los pacientes con capacidades diferentes.

Como a mi me gusta siempre ir por más en todo lo que hago, y considerando que disfrutaba mucho estar en contacto con los caballos, busqué la posibilidad de interiorizarme en el deporte, esta vez, haciendo algo profesional, y es ahí donde me incorpore al equipo de Agostina Firpo, en el Club Hípico de Buenos Aires, para poder entrenarme en la especialidad de Adiestramiento, la cual consiste en realizar coreografías con el caballo, es decir, lograr movimientos (los cuales son estudiados por el jinete y calificados en las competencias) para que el caballo realice diferentes "bailes" en una pista rectangular, algo muy entretenido a la vista y que a nivel deportivo exige muchísima dedicación del jinete , generando una conexión única entre jinete y caballo.

Esta disciplina la realice desde mis 17 hasta los 20 años. Luego, al comenzar a estudiar de forma universitaria Periodismo Deportivo, tuve poco tiempo para continuar, aunque seguí ejercitándome pero esta vez, en gimnasios con aparatos.



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